miércoles, octubre 23, 2013

La caja de Pandora

Aun desgrano día a día las señales de tu paso por mi cama, las miro, las reconozco e intento olvidar que son tuyas echándome a otro lado…
La soledad de una cama deshecha, un desconocido que ronca a tu lado, despierto e intento averiguar su nombre. Siempre me sale el tuyo aunque ya no me acuerde y les llamo a todos igual. Sentir que mi piel no pega con ninguna salvo con la que dejaste tú en la vitrina de trofeos, ya ajada y rota por el tiempo, a veces los recuerdos vienen más vívidos cuando no lo intentas.

Quizá quedé muda porque te llevaste mi voz, quizá vago por los bares donde te encontré buscando colillas a medio fumar para recogerlas, como nos recogimos aquel día que perdimos la esperanza…

viernes, octubre 04, 2013

Retrocesos

Hace un rato que dejé de escuchar los aviones. Busco una excusa para irme antes de que bajes y me encuentres, la encuentro, y mis piernas dejan de responder. Tiemblo y me escondo tras una sonrisa de terror mientras la gente a mi alrededor ya ha encontrado el fin a una alarma de miedo, ese miedo, podía olerlo en sus ojos, algunos dicen adiós y otros se dejan caer en un abrazo, de los lejanos...
Te veo de lejos, pero no lo suficiente para darme tiempo a recobrar el aliento antes de que llegues a mi.
Tú, con tu sonrisa, no como la mía, la tuya es de verdad, quizá nerviosa, pero pura como siempre... y es como si no hubiera pasado el tiempo...